elpost

Investigación, análisis e información.

Adiós DEA; ¡bienvenida Homeland Security!

Foto: Especial

20/08/2024

La nueva estrella de la “cooperación” de inteligencia en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, es la agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), una oficina que depende del Departamento de Seguridad Nacional de los EE. UU. para el combate, entre otros delitos, del crimen organizado y el tráfico de drogas.

Los agentes de esta corporación, poco conocida en México por sus ciudadanos, pero ya muy familiarizada con funcionarios del gobierno y recurrentemente citada en los informes de inteligencia que lee el presidente en Palacio Nacional, fueron los encargados de la operación “Mayo” Zambada que culminó con la detención del capo el 25 de julio.

La guerra contra las drogas ya no es un asunto de la DEA en México, por lo menos no si se quiere abordar con seriedad esta agenda. La veterana agencia antidrogas lleva años perdiendo terreno en las operaciones que importan para los estadounidenses, y el gobierno mexicano la arrinconó de tal manera que sus operativos son prácticamente unilaterales.

Creada luego de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, la agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional ya alcanzó la reputación y la eficacia del FBI frente a la comunidad de inteligencia de los Estados Unidos.

En México los agentes de la HSI tienen oficinas en Tijuana, Juárez, Hermosillo, Monterrey, Matamoros y la Ciudad de México, y una de sus prioridades es generar inteligencia para capturar capos vinculados principalmente con el tráfico de fentanilo.

Las operaciones más recientes de la HSI en México han estado enfocadas al desmantelamiento de las estructuras del cártel de Sinaloa, apuntando directamente a los hijos de Joaquín Guzmán Loera y al clan de Ismael Zambada.

El gobierno de López Obrador ha cooperado con la agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional, bajo la premisa de actuar con discreción, mientras mantiene un discurso beligerante dirigido a la DEA y a su historia reciente de agravios en México.

La HSI ha actuado con tal grado de estrategia y tacto político en la administración de López Obrador, que ya cuenta con un número importante de aliados en la comunidad de inteligencia y Defensa para operar en territorio mexicano.

El hombre fuerte de Homeland Security en México es Omar García Harfuch, el próximo secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana y enlace directo con la virtual presidenta de México, Claudia Sheinbaum.

García Harfuch ya probó las mieles de la cooperación de inteligencia con la HSI, y algunos golpes contra el crimen organizado en la Ciudad de México cuando fue titular de seguridad pública, como el decomiso de 1,6 toneladas de cocaína proveniente de Colombia y con destino a Los Angeles en julio de 2022, fue gracias a las labores de los agentes del Departamento de Seguridad Nacional del gobierno de Estados Unidos.

La estrategia contra el crimen organizado de García Harfuch, diseñada para la administración de Claudia Sheinbaum, y enfocada en la concentración de inteligencia en el CNI, contiene altos ingredientes de cooperación con la agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional, y es muy probable que los encuentros con Katrina W. Berger, la directora ejecutiva adjunta de la HSI, sean muy frecuentes. /JT