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Matheo Pinzón y Aldo Díaz, en la red de contratistas que arropa el IMSS

23/09/2024

Matheo Pinzón Woloski, hijo de Hanna Woloski, actual asesora del Secretario de Salud, Jorge Alcocer, se ha visto envuelto en una red de contratistas en el sector salud, encabezada por el empresario Aldo Díaz. Este vínculo ha despertado sospechas sobre una red de influencias que opera de manera encubierta en organismos clave del gobierno, particularmente en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Matheo Pinzón Woloski comenzó a trabajar en Birmex el 1 de marzo de 2024, tras haber laborado en Ethomedical como subgerente de operaciones entre abril de 2023 y febrero de 2024. En Birmex, donde ocupó un puesto administrativo en la Dirección de Control de Calidad, su función principal consistía en el manejo de recursos digitales. Pinzón Woloski, ingeniero químico del Tec de Monterrey, se distinguió por su comportamiento irregular al notificar a proveedores sobre la asignación de claves de medicamentos antes de que las bases de datos fueran oficialmente publicadas, lo que desató alertas sobre el uso indebido de información privilegiada.

Su estancia en Birmex se vio interrumpida por un incidente relacionado con un viaje personal a París, donde asistió sin autorización oficial a los Juegos Olímpicos. Luego del escándalo que forzó su despido, Pinzón Woloski fue rescatado por su influyente mentor, el empresario Aldo Díaz, un oscuro exfuncionario del gobierno convertido en contratista del sector Salud y vinculado a la operación de la empresa Ethomedical.


Aldo Díaz Pérez ha construido, a lo largo de más de una década, una vasta red de empresas en el sector salud mediante el uso de prestanombres. Con más de 70 razones sociales, Díaz ha asegurado contratos multimillonarios aprovechando la fragmentación y la corrupción del sistema de compras del gobierno. Algunas de las empresas relacionadas con Díaz incluyen Ethomedical, Arnold & Jelga, Grupo Actipro, Comercializadora Adelfa, PCB Empresarial Monterrey, Grupo Osherx y Distribuidora Sagitario.


A lo largo de su carrera, Díaz ha mantenido vínculos con figuras clave, como el exdirector de Pemex, Carlos Treviño. Además, Díaz trabajó en Segalmex, una dependencia gubernamental donde se encargaba de las licitaciones y adjudicaciones de contratos, lo que le permitió perfeccionar su estrategia de influencia y acceso a los procesos de contratación en el sector público.

A pesar del escándalo en Birmex, Aldo Díaz no perdió tiempo en reincorporar a Matheo Pinzón a las filas del sector salud. Lo posicionó estratégicamente en el IMSS bajo la dirección de Zoé Robledo, de quien Díaz asegura tener acceso mediante su nuevo fichaje estrella. La entrada de Pinzón al IMSS se percibe como parte de una jugada calculada para mantener el control en las decisiones de compra de medicamentos y la adjudicación de contratos en una de las instituciones más grandes del país.

La integración de Matheo Pinzón Woloski en el IMSS, tras su controvertida salida de Birmex, revela la influencia que mantiene en los organismos clave del sector salud el empresario Aldo Díaz. Las relaciones entre estos personajes ponen en duda la integridad de los procesos de licitación y asignación de contratos en el Instituto Mexicano del Seguro Social, y prende un foco rojo en la entrante administración de Claudia Sheinbaum, sobre las actividades de los contratistas dentro del sistema de salud público, y específicamente del IMSS, donde ratificó a Zoé Robledo como director del instituto. /Jorge Torres y Manuel Pineda